Mi Mano Sin la Tuya

¿Cuánto tiempo es necesario pá olvidar?

Si el amarte fue el destello que la luna,
ya cansada de mirar triste mi andar,
te vino a traer a aquí… para fortuna.

Fue tan poco el recorrido sobre el mar
pues del caudal sólo quedaron dunas,
tu compañía transformaste en soledad
y aquel amor se evaporó junto a la espuma.

Y en el desierto en que se ha vuelto mi mirar
imploro a Dios por un segundo la tertulia
para que mires que este amor es de verdad,
para que sepas que mi herida aun no se cura.

Hoy cuando vago se hace lento el caminar,
el viento azota sobre mí toda su furia,
ya no me quiere ni me dejará volar
hacia ese mundo de los sueños y locuras.

Sé que estoy solo y sólo puedo recordar
aquel momento en que las almas eran una;
vivo en recuerdos y por nada he de olvidar
las caminatas con las manos siempre juntas.

Y en mi desierto sólo queda arena y sal,
y soledad que pide a gritos por tu ayuda,
porque mi llanto está tan seco como un mar
sin el caudal de nueva vida: tu ternura.

Este desierto es paciente al esperar,
pues ya no quiere alimentarse de otra lluvia,

porque cansado está mi paso si no estás, 

porque muy triste está mi mano sin la tuya.